El yuan de China siguió con pérdidas para tocar mínimos de nueve meses frente al dólar este viernes y parece encaminado a su peor semana desde la devaluación de 2015.
La Reserva Federal de EE. UU. de línea dura, la ventaja del rendimiento chino desvaneciéndose, los bloqueos por Covid-19 en el país oriental y las crecientes presiones económicas han arrastrado al yuan a su punto más débil del año.
Las pérdidas del yuan se aceleraron este viernes después de una ruptura del nivel psicológicamente crítico de 6,4 por dólar, con el yuan en tierra terminando la sesión doméstica en 6,4875 y cayendo hasta 6,5 posteriormente.
En la semana, la divisa fuertemente administrada cayó un 2% frente a la moneda estadounidense, la mayor caída semanal desde agosto de 2015, cuando China diseñó una fuerte devaluación única.
Pero no todos ven esto como algo negativo, de hecho, algunos están «bastante contentas» con tal debilidad del yuan, lo que podría aliviar la presión sobre los exportadores chinos que están sufriendo bloqueos, dijeron los comerciantes.
«Es probable que el crecimiento de las exportaciones se desacelere, por lo que permitir cierta debilidad en el yuan en este punto está bien», comentó un operador de un banco chino.
Varios comerciantes expresaron que aún no habían visto aparecer en el mercado a los bancos estatales chinos, que generalmente actúan en nombre del banco central, para detener las pérdidas del yuan, lo que fue visto como una señal de aprobación oficial. por alguna depreciación.
El índice de la cesta ponderada por el comercio del yuan, un indicador que mide su valor frente al de sus socios comerciales, bajó a un mínimo de dos meses de 104,25 el viernes. China desea mantener el índice en un cierto rango para asegurarse de que el país no esté en desventaja en el comercio exterior.
En el comercio de opciones de yuan, la volatilidad implícita y las reversiones de riesgo solo mostraron una leve presión de depreciación del yuan por delante.
Es posible que los depósitos de divisas de China adquiridos por el sector privado desde la pandemia, junto con la gestión de la política de divisas del Banco Popular de China (PBOC) a través de su fijación diaria, consigan evitar que el yuan se hunda demasiado.
El viernes, el PBOC fijó la tasa del punto medio en un mínimo de seis meses para el yuan en 6,4596 por dólar, aún más firme que la estimación de Reuters de 6,4641.
Si bien una fijación mucho más débil de lo esperado vista el miércoles es una política que busca enfrentar la debilidad del CNY.
El regulador de divisas de China dijo a los medios el viernes que las autoridades eran capaces de adaptarse a los cambios de política de la Fed y esperan que las incertidumbres en el extranjero tengan un pequeño impacto en la moneda china.
Aun así, las instituciones financieras globales, incluidas J.P. Morgan y UBS Global Wealth Management, redujeron sus pronósticos para el yuan luego de las fuertes fluctuaciones.
